Corrigiendo las pruebas de evaluación inicial nos hemos dado cuenta de la importancia de esta fluidez. Hemos encontrado que aquellos alumn@s que tienen una velocidad lectora de más de 70 palabras por minuto consiguen buenos resultados (más de un 7) en:
- Comprensión lectora (como era de esperar).
- Ortografía.
- Producción de textos.
- Incluso en caligrafía (tan solo en un alumno no se cumple esta relación).
- Y por tanto, obtienen buenos resultados en las calificaciones finales de la prueba de lengua. Aquellos alumnos con buena lectura consiguen buenas notas (entre 7,25 y 8,25). En clase tan solo tenemos una alumna que lee por encima de las cien palabras (128 p/m), es la única que consigue sobresaliente en la prueba.
- Buenos resultados en matemáticas (tan solo encontramos un par de excepciones que se quedan en el suficiente y bien).
Pensamos que el problema puede estar (además de en condicionantes socioculturales) en el uso de métodos de aprendizaje lector de caracter analítico, que se basan en el silabeo. Pensamos que puede ser útil comenzar en el primer ciclo de primaria a utilizar, al menos, métodos mixtos de enseñanza (que unan la conciencia silábica con la percepción global de las palabras, de forma que les permitan leer de un solo golpe de vista las palabras).
En clase tenemos 8 alumn@s de 20 con buena fluidez lectora. En nuestro caso, integraremos (junto con el resto de dinámicas que solemos usar que buscan un uso funcional del lenguaje) actividades que permitan ir ganando en esta capacidad de percepción global de las palabras y en la mejora de la caligrafía. Ya os iremos contando cuáles son las dinámicas que desarrollaremos para ello (ya tenemos algunas ideas).
Eso es la pura realidad, es tan importante para todas las áreas que hay que proporcionar ocasiones para cultivarla!!!
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